El Museo de Arte Contemporáneo de Toledo (MACTO) abrió sus puertas al público el 12 de marzo de 1975, en la conocida como “Casa de las Cadenas”, magnífico ejemplo de residencia nobiliaria toledana del siglo XVI. Su nombre proviene de la cadena que pendía de la pared del zaguán y, desde el siglo XX, de su fachada, y que hacía referencia al derecho de asilo que ostentaban los Zárate, propietarios del inmueble. A finales del siglo XVIII, el edificio se divide y se arrienda a varios inquilinos, convirtiéndose en casa de vecinos, uso que mantuvo hasta su adquisición por el Ayuntamiento en los años sesenta, entidad que lo cedió a su vez al Estado para la instalación del museo.
MACTO - Museo de Arte Contemporáneo de Toledo 1975-2001
Con anterioridad a su apertura, el museo echaba a andar gracias al Decreto 3121/1973, de 16 de noviembre (B.O.E. de 12 de diciembre), de creación de la institución, haciéndolo depender del Museo de Santa Cruz. En esas fechas, el régimen franquista se esforzaba por mejorar la imagen de España, y la inauguración de un museo de arte contemporáneo encajaba con el deseo de ofrecer el retrato de un país moderno y abierto. Desde esas fechas y hasta su apertura, la institución se nutrió de un buen número de donaciones de artistas españoles, de sus familias, de coleccionistas privados y de generosos depósitos de colecciones y museos, en especial del Museo Español de Arte Contemporáneo, germen del actual Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, sin olvidar los fondos propios del Museo de Santa Cruz. Con posterioridad, la institución siguió aumentando su colección con más donaciones y adquisiciones, del Estado primero y de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha después.
Pese al incremento de la colección y a la celebración de exposiciones temporales y otras actividades, el museo no consiguió destacar en el panorama museístico de Toledo porque quizá las circunstancias de su origen pudieron afectarle. Lo cierto es que su cierre temporal por obras en 2001, se convirtió a la postre en definitivo, trasladándose toda su colección a los almacenes del Museo de Santa Cruz.
En el cincuenta aniversario de su fundación, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha recuerda al museo con esta exposición temporal, homenaje al esfuerzo realizado para dotar a Toledo con una institución que velara y difundiera el Arte de los años sesenta y setenta en España.
La exposición recrea el ambiente del antiguo caserón de la calle de las Bulas, comenzando con una sala dedicada a Toledo, con varias obras de Aureliano de Beruete y Ricardo Arredondo, paisajistas de finales del XIX y principios del XX, junto a cuadros “toledanos” de artistas posteriores.
Continúa la exposición con algunos pintores protagonistas del periodo de las vanguardias, como Benjamín Palencia o Francisco Iturrino, y en la tercera y cuarta salas se muestra el grueso de la colección, con trabajos de artistas encuadrados en las denominadas Segunda Escuela de Vallecas, Escuela de Madrid o Escuela de París, incluyendo obras de tendencia surrealista, expresionista o neocubista, empleando un lenguaje abstracto o, sobre todo, figurativo, incluyendo también pintores netamente realistas. Antonio López, Rafael Canogar, Amalia Avia o Juan Barjola son algunos de los nombres representados.
Finaliza la muestra con una sala dedicada al Grupo Tolmo, agrupación de artistas vinculados con Toledo, que aglutinaron buena parte de la actividad artística de la ciudad durante varias décadas.
Museo de Santa Cruz (Toledo)
Del 02/06/23 al 04/02/24
Horario de apertura
De lunes a sábado de 10:00 a 18:00 h.
Domingos de 09:00 a 15:00 h.
Días de cierre
24, 25 y 31 de diciembre
1, 6 y 23 de enero